Fábrica Real de Tabacos (II): La seguridad del recinto

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El edificio se convirtió en uno de los centros económicos más importantes de Europa, por lo que fue dotado de elementos defensivos.
Realmente estaban destinados a evitar el contrabando por parte de los trabajadores, y no tanto a evitar posibles saqueos.

Su entrada principal se abría a través de la muralla que recorría la calle san Fernando y que se unía a la puerta homónima de la ciudad.

Cuando esta muralla fue derribada se construyó una verja que cerraba todaba la fachada de la calle san Fernando.

Fuente: Fundación Juan March

Posteriormente, para el ensanche de la calle san Fernando, la verja fue retranqueada hasta su posición actual.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

La fábrica, además, estaba rodeada por numerosas garitas. Hoy se conservan algunas.

Las dos primeras se encuentran tras pasar la cancela de la entrada principal.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Estas garitas son las más labradas del conjunto, aunque esto se debe a su carácter prioritariamente ornamental, lejos del aspecto que mostraba la original garita a la que sustituyen.

Fuente: Manuel

Estas otras se sitúan en las esquinas del recinto.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

También queda una de las garitas interiores desde las que se defendía el foso.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Esta ha sido recientemente adecentada y protegida.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Hay que tener en cuenta que al subir el nivel de la calle con el paso de los años, la altura a la que se encontraban las garitas de vigilancia ha descendido.

El foso rodea los tres laterales del edificio que no protegía la muralla de la calle san Fernando.

Foso en la avenida del Cid.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Foso en la calle Palos de la Frontera.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Foso en la calle Doña María de Padilla.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

El único punto que salvaba este foso era un puente levadizo que daba acceso desde la calle Doña María de Padilla.

Fuente: Bar Casa Julián

Fuente: Fototeca de la Universidad de Sevilla

En la década de los 70 comenzaron las obras para consolidar este puente y darle mayor capacidad de carga.

Fuente: ABC

La empresa encargada quebró y la obra quedó paralizada durante algunos años.

Fuente: ABC

Cuando las obras finalizaron, el antiguo puente levadizo se había convertido en un paso permanente cuyo tablero es sostenido desde entonces por unos arcos de nueva construcción.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Aún quedan algunos restos de su antiguo funcionamiento.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

También podemos leer en los sillares una inscripción sobre la obra del foso, finalizada en 1770.

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

Fuente: Sergio David Cansado (Esa Sevilla)

No es cierto, como se dice, que el orden de estos pilares esté invertido.

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